lunes, 7 de abril de 2008

Ella (18:45)

Rogamos a Él que se manifieste, por lo que más quiera.

Qué majas las tortugas leopardo de la tele, menudo banquete de zanahorias se estaban pegando (y no, Él, no preguntes si tengo envidia de las tortugas).
Si ya se sabe, que las zanahorias son muy buenas pa la vista. Y si no puedes correr, al menos que puedas ver a tu enemigo para esconderte a tiempo. Digo yo.

Pues eso, Él, dí algo, por tu padre.
Que además vas a venir a visitarme, a cataluñear por estos lares.
Serás acogido en Destilería casa Marlo con los brazos abiertos y la ducha forradica de muchachos bien fornidos. Que te voy a poner un Wenwor pa tí solico.
Pero nada de tocarse, que te quedas ciego.
Y ahí ya no hay zanahoria que valga.